Apostar por lo nuevo, derrota segura

Siempre que me propongo emitir algún tipo de creación
choco con la frustrante realidad de no poder encontrar nada nuevo que decir, mostrar, hacer...

Creo que de todos modos está sobre valorada la novedad, sin embargo, tenemos un fetiche por ello.

Siempre hay nuevos puntos de vista, nuevas formas de hacer. De todos modos, salir de lo mismo se torna cada vez más complejo.

La "creación" es algo que realmente limita; costosamente intentamos CREAR y nos sentimos satisfechos de apropiarnos de nuestra capacidad innovadora.

Yo no apuesto por ello. Todo me parece viejo...

Toda creación me parece imitación.

Hemos aprendido que lo nuevo es un valor, y la creación, símbolo del desarrollo.

Desde mi bautizo que supongo la creación. Cada día que pasa me confirman que
es una vil idea que ha amarrado mi capacidad de sorpresa a un ínfimo nivel.

Hoy, no apuesto por lo nuevo, ya no existen creaciones, la innovación es invención.

Hoy puedo sorprenderme.

Existencialismo..

Es divertido escribir cosas cuando uno está viviendo un proceso existencial. Lo ridículo de esta situación sobrepasa mis propios límites, pero hay un sólo problema: el preguntarse por la existencia es tremendamente natural.
Es frustante saber que todo lo que hoy pueda escribir tendrá ese tono cuestionador e insatisfecho, muchas veces atribuido a un rasgo adolescente.
Es frustrante estar insatisfecho con todo lo mundano y a la vez anular la espiritualidad.
Me avergüenza el aceptar que padezco aquel patético cuestionamiento existencial, infantíl y poco académico...
De todos modos, me rindo.